No tóxicos
24 febrero 2008
Despedida temporal
06 febrero 2008
Olores que enferman
La OMS no considera aún la sensibilidad quica una enfermedad como tal, pero en otros países -por ejemplo, Alemania y Canadá- se la toman muy en serio. En España, el Hospital Clínico de Barcelona registra entre 50 y 60 casos nuevos de este síndrome al año. Un equipo de este centro sanitario ha evaluado durante dos años una serie de 52 pacientes afectados por este síndrome y la conclusión es que parece aumentar la incidencia entre la población. En gran parte de estos pacientes, los perfumes, ambientadores, detergentes y humo del tabaco fueron los principales desencadenantes de los síntomas.
¿Cuáles son los mecanismos para que sustancias químicamente tan diferentes produzcan idénticos resultados? No está nada claro. Hay quien postula que la respuesta multisistémica desencadenada por un agente químico se debe a las interconexiones entre el nervio olfativo y el sistema límbico cerebral, una zona muy vulnerable a la sensibilización, según Jordi Obiols, técnico superior de prevención del Centro Nacional de Condiciones de Trabajo, que ha realizado una nota técnica sobre este síndrome.
El diagnóstico es clínico y se realiza con el cuestionario QEESI. La sintomatología es muy amplia y afecta a varios órganos; los síntomas se repiten con cada exposición y se reproducen con dosis muy bajas. Los agentes químicos no están relacionados entre sí y los síntomas mejoran y desaparecen al cesar la exposición. Las estimaciones sobre cuántas personas pueden verse afectadas son dispares.
La sensibilidad química múltiple se ha presentado en multitud de ambientes (centros de enseñanza, oficinas bancarias, hoteles, edificios municipales, geriátricos, edificios sanitarios), casi siempre relacionados con la aplicación de insecticidas diversos, principalmente organofosforados y piretroides.
Uno de los primeros brotes del que se tiene constancia fue en 1994 en un edificio hermético, un laboratorio del complejo sanitario de Vall d'Hebron, en Barcelona. "Al poco tiempo de realizar dos desinsectaciones en una semana, un grupo de trabajadoras empezó a sentir múltiples síntomas, aparentemente no demasiado graves, pero que desencadenaron, además de fatiga persistente, una intolerancia a los olores ante múltiples sustancias, y estas exposiciones les desencadenaban síntomas de nuevo", explica Francisca López.
Uno de los especialistas que más han trabajado con este tipo de casos es el neurólogo Julián Márquez, cuando trabajaba en el hospital de Bellvitge. El 90% de los 302 pacientes diagnosticados por Márquez, sufrían trastornos cognitivos que afectaban a la memoria, la concentración y la capacidad de realizar tareas simultáneas. Estos síntomas iban acompañados de parestesias, gran fatiga y debilidad muscular.
La sensibilidad química fue causada, en la mayoría de casos, por la exposición en lugares cerrados a insecticidas organofosforados, incluso en cantidades muy bajas del producto, añade Julián Márquez. En el 90% de los pacientes la dolencia se cronificó, con mayor intolerancia a olores y más síntomas. Con el tiempo, pueden aparecer síntomas nuevos, como alteraciones visuales, explica el neurólogo.
Fuente: El País
Sensibilidad Química Múltiple
Quienes padecen esta afectación ven reducida notablemente su calidad de vida: sufren de dolores de cabeza, picores en los ojos y la boca, cansancio general o problemas cognitivos en presencia de uno o varios agentes químicos.
El síndrome de sensibilidad química múltiple puede iniciarse por la exposición a un solo producto químico en el medio ambiente, principalmente un insecticida organofosforado o un disolvente orgánico. Una vez iniciada la reacción a este desencadenante primario, la persona también puede enfermar por la exposición a desencadenantes secundarios, como productos de limpieza doméstica (lejía, salfumán), perfumes, desodorantes, pinturas y barnices. Este síndrome no es una alergia, porque no hay mediadores inmunológicos.
05 febrero 2008
Asociaciones demandan al Ministerio de sanidad por permitir el uso del mercurio en los programas de vacunación
Estas asociaciones demandarán asimismo a los laboratorios responsables de las vacunas que son obligatorias para los españoles, por haber introducido en algunas de ellas el mercurio, "un componente altamente nocivo para la salud".
Fuentes de las asociaciones demandantes explicaron que algunas vacunas utilizan un conservante que contiene mercurio denominado thimerosal que, por tanto, puede ser perjudicial para la salud. Aunque es posible solicitar la vacuna sin este conservante, continúan las mismas fuentes, la gente en general lo desconoce, porque Sanidad no informa de ello. Ante esta situación, las agrupaciones reclamarán una indemnización económica por los daños y perjuicios causados en la salud de los pacientes. Concretamente, los demandantes son Andeco (asociación que trabaja en la Protección Ambiental a través del Ecoturismo y en la defensa de la Salud), Aldis (Asociación para Prevenir y Sanar Enfermedades Infantiles), socios de Mercuriados (Asociación Española de Afectados por Mercurio de Amalgamas Dentales y Otras Situaciones) y la Asociación para Vencer el Autismo, problema que según algunos estudios aumenta por la contaminación por mercurio. Las asociaciones demandantes aseguran que el mercurio es un componente altamente nocivo para la salud, del que pueden derivarse serias dolencias, tales como problemas neurológicos, artritis, esclerosis múltiple, lupus, fibromialgia, síndrome de fatiga crónica, entre otros.
08 enero 2008
Jornada técnica sobre Arquitectura Ecológica y Bioconstrucción en la sede del Parlamento Europeo de Madrid
La vivienda, cómo la construimos, con qué materiales y cómo la utilizamos, puede contribuir al ahorro de emisiones de CO2 de muchas maneras y además, en gran cantidad.
La elección del diseño de la vivienda, atendiendo a las características específicas del lugar, la elección de los materiales, de los sistemas de gestión del agua, de los residuos, la aplicación de energías renovables, la elección del lugar, son aspectos básicos a la hora de edificar una vivienda que emita pocas emisiones de CO2. Por ejemplo, una vivienda convencional y con un cálculo de 3 personas habitando en ella, puede llegar a emitir cerca de 21 Tn de CO2/año, la misma vivienda, edificada bajo los criterios de Bioconstrucción, sólo llega a una emisión de 7 Tn de CO2/año.
Por otra parte aplicar criterios de Bioconstrucción conlleva la creación de espacios saludables.
Al construir una casa con los criterios de la arquitectura sostenible, se deberán tener en cuenta una serie de conceptos básicos:
- Los diseños deben incorporar diseño bioclimático con aprovechamiento de las energías renovables, orientaciones favorables hacia el sol y protecciones y aislamientos adecuados a cada situación.
- Los materiales deben ser naturales, preferentemente autóctonos, no tóxicos para la salud, duraderos y reciclables.
- Los sistemas constructivos deben respetar el medioambiente, aprovechando los recursos naturales con responsabilidad ecológica, adaptando las soluciones de la arquitectura tradicional a las nuevas necesidades.